Midgard

Era el mundo de los humanos, que fue creado por los dioses Odín, Vili y Ve después de acabar con el gigante primigenio Ymir. Se la conoce con el término “tierra del medio” Al terminar la batalla, los dioses llevaron el cadáver al abismo y empezaron a crear el mundo. Con la piel crearon la tierra, con la sangre y el sudor, los océanos, con sus huesos las rocas y las montañas, con su pelo la vegetación, con sus dientes los acantilados donde con sus cejas formaron la frontera con el mar. Para terminar, decidieron cerrar el mundo usando el cráneo del gigante como bóveda, donde cuatro enanos se encargaron de sujetarla, se llamaban Nordri, Sudri, Austri y Vestri y simbolizaban los puntos cardinales. Cuando colocaron el cráneo, los sesos se dispersaron por el aire y crearon las nubes.

Pero los dioses aún no se sentían satisfechos ya que el mundo estaba muy oscuro, por ello determinaron ir a Muspelheim para sustraer las centellas de la espada de Surtr. Con las centellas más grandes decidieron crear el sol y la luna y con las demás crearon las estrellas.

El sol y la luna fueron puestos sobre dos carros que giraban constantemente sobre Midgard, y así crearon el día y la noche. Para que estos giraran continuamente crearon mandaron a Sköll y Hati para perseguirlo, nunca los alcanzaban salvo en ciertas ocasiones y así se crearían los eclipses el caballo. El carro de sol lo llevaba lo llevaba el caballo Skin que con su galope creaba la luz del día, y la luna lo llevaba el caballo Hrim que a su marcha dejaba el roció y la escarcha.

Al terminar su obra los dioses decidieron que era hora de poblar el mundo y crearon a los humanos, de un fresno fue creado el primer hombre, Aske y de un aliso crearon a la mujer, Embla. Los dioses les dieron diversos dones y les dijeron que deberían ocuparse del mundo que ellos habían creado, cuidando las plantas y los animales y crearon una familia, comenzando así la raza humana.