Era el caballo Gris de 8 patas, hijo de Loki y Svaðilfari. Su dueño era el dios Odín. Se decía que era el caballo más rápido, podía ir de una lado al otro del horizonte y en ocasiones era usado para llegar al Hel (reino de la muerte). Simbolizaba los ocho vientos que soplan desde los puntos cardinales y en sus dientes tenía runas grabadas.
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