Estaba compuesta por los siguientes dioses: Nun, Nunet, Heh, Heket, Kek, Keket, Amón y Amonet; de donde surgió el dios Ra.

Nun

Se le consideraba un dios beenefactor, siendo representado en ocasiones como un humanoide o con el rostro de una rana (Hermópolis) llevando como corona dos plumas o con su nombre jeroglífico sobre la cabeza.

Los sobrenombres que más le otorgaron fueron: «El Océano Primordial», «Las Aguas de la Vida» o «El Padre de los Dioses». Nun, siendo el elemento original, careció de santuarios y de fiestas en su nombre. Los lagos santos en los templos eran la representación de este océano primordial, así como el sitio donde se realizaban rituales de renacimiento con baños simbólicos, estilo a un bautizo.

Nun se puede encontrar simbolizado en la mayoría de los santuarios egipcios, en los muros de los templos. En tumbas y papiros está bastante reflejado, interpretado con frecuencia como si fuera una de las horas nocturnas.

Nunet

Es la diosa que es, junto con el dios Nun, su doble, la primera de las

cuatro parejas en la creación y el origen del universo. Representa a las primeras aguas, el Océano primordial de la Ogdóada de Hermópolis.

Al desbordarse el Nilo por las marismas del delta y luego retirarse, surgían ranas y serpientes. Estas primeras eran identificadas con la forma de los cuatro dioses masculinos de la Ogdóada, y a las últimas como si fueran las divinidades femeninas. Es por ello que a Nunet se la representa frecuentemente con la cabeza de una serpiente, liderando junto a su pareja, Nun, el caos acuoso.

Con Nun, es el elemento del que surgió la vida, el origen de la luz, que dio forma al mundo. Es el lugar de donde surge por sí mismo el gran dios Amón-Ra.

Heh

Se trata de la divinidad del espacio de la eternidad y el infinito. A Heh se le representaba como un dios masculino que se encontraba de rodillas, o sentado, encima del símbolo del oro. Porta en sus manos dos hojas de palmera que representan los millones de años de vida que se deseaba para los egipcios.

Heh fue adorado en el Bajo Egipto y en el oasis de Dajla. En los oasis del Antiguo Egipto se le consideró un maestro del tiempo infinito.

Heket

Heket, o también escrita Heqet, es diosa de la beneficencia, representando la vida y la fertilidad en los nacimientos, así como comadrona que asistía a la mujer en el parto. Otras formas de escribir o pronunciar su nombre son: Heqat, Hekit, y de forma más rara: Hegit o Heget.

En general, a Heket se la representó como una rana, o una mujer con rostro de rana.

Durante cada mañana, ayudaba al nacimiento del Sol. Por ello, se la consideró como una divinidad de las embarazadas, denominada «La que hace respirar», pues otorgaba el soplo de vida al neonato, poniéndole el ankh ante la nariz.

Debido a que también ayudó a Osiris a resucitar, fue considerada a su vez como ayudante de los fallecidos en su resurrección.

Se la consideró hija de Ra y mujer de Shu, con quien engendró a Nut y Geb. A su vez fue compañera de Jnum en Antinoópolis, aunque en la región de Kom Ombo es la esposa de Sobek-Ra.

Fue relacionada con Nut y Hathor; también fue identificada con Isis en Hibiu, para acabar convirtiéndose en otro aspecto de ella. Además de ser llamada «La que hace respirar», recibió el título de «Señora del doble país» en Abidos.

Kek

De nombre Kuk, Kek o Keku, es la divinidad del concepto de «las tinieblas» o «la oscuridad».

Siendo un dios de la noche, también estuvo relacionado con el día, por lo que se le conoció a su vez como «el que aporta la luz del día», pues era el encargado de esas horas de la noche que anuncian la llegada del sol.

Siendo componente de uno de los cuatro conceptos dualísticos de la Ogdóada, su aspecto masculino tuvo la representación de una rana, o una persona con rostro de rana, mientras su opuesto femenino, Kuket (Kauket o Keket) lo fue con una serpiente o como una divinidad femenina con rostro de serpiente.

Acompañado de su pareja, representan los poderes masculino y femenino de las tinieblas que arropaban el abismo primigenio de las aguas.

Keket

Se trata de la pareja mujer del dios rana Kek. Ambos representaban las tinieblas.

Mano a mano con su pareja, ambos simbolizaban los poderes masculino y femenino de las tinieblas que amparaban el abismo primigenio de las aguas.

Amón

En su origen se trataba de un dios de Tebas, cuyo culto se extendió después de que esta ciudad fuese una de las más abundantes en Egipto después de que los hicsos fueran expulsados por los príncipes tebanos que darían nacimiento a la Dinastía XVII.

Se le representó con forma masculina y una piel rojiza o azul, o en ocasiones con el rostro de un carnero. En ambas interpretaciones porta en su cabeza un  tocado con dos plumas, las cuales están divididas en secciones, así como un disco solar sobre la base (Amón-Ra). En ocasiones llevaba el cetro uas y el ankh.

En los Textos de las Pirámides está considerado como un dios del aire, aunque más tarde fue asociado con Ra, dios solar de Heliópolis, con el nombre de Amón-Ra convirtiéndose en la principal divinidad de la religión egipcia. Los faraones adoptaron en su titulatura ser «Hijo de Ra».

Amón es el símbolo de varios conceptos abstractos que están asociados al aire, pues se halla en todo lugar y en todo instante. No se le puede ver, mas sí sentir. Es quien reparaba en los rezos y peticiones de la gente en ruegos y ofrendas. A Amón se le asocia a otras divinidades, como a sus mujeres Amonet y Mut, y a su vástago Jonsu.

Amonet

Amonet «la Oculta», se trata de la divinidad guardiana y primigenia de lo escondido, lo oculto, personificando al viento del norte, el que porta la vida.

Fue representada como si fuera una serpiente, o una mujer con rosotro de serpiente, llevando la corona Roja del Bajo Egipto en Tebas, y con el aspecto de una mujer con el rostro de una rana en Hermópolis. También, en ocasiones, como si fuera una vaca.

Es la diosa protectora del faraón que se halla «presente» en la ceremonia de toma de posesión del trono, en ocasiones junto a Min. Amonet, en la cosmogonía de Thot, es la mujer de Amón, mas perdió relevancia por cuenta de Mut, a quien considerarían después la mujer de Amón por ir aumentando el culto a Osiris. Más tarde sería Isis quien adquiriera todas sus cualidades. En la Época Baja, Amón y Amonet llegan a ser parte de la Ogdóada hermopolitana.

Su veneración aumentó en el Imperio Medio y se afianzó en el Imperio Nuevo. Fue adorada en Hermópolis, también en Karnak, acompañada de Amón y Mut y en el templo de Luxor con el aspecto de Opet; en Deir el-Hagar como esposa de Amón. Tuvo sacerdotes para su culto en concreto ya en la Dinastía XVIII, llamados los profetas de Amonet.

Ra

Ra era la representación de la luz solar, otorgador de vida, así como también el encargado del ciclo de la muerte y el renacimiento.

Fue representado como un dios masculino con la cabeza de un halcón sobre la que llevaba el disco solar. Otro culto que se le otorgó a este dios fue como Ra-Horajty, un dios solar con rostro de halcón, llevando por el disco solar y el uraeus, con cetro uas y ankh.

Dios padre de todos los dioses, podemos saber más sobre él en los siguientes enlaces:

Ra, dios padre

Leyenda: Mito de la creación