Dios itifálico que representaba la fuerza generadora de la naturaleza, la fertilidad en todos sus aspectos; protector de las cosechas, a él se le ofrecía la primera cosecha de trigo en la “Fiesta de la Escalera”; también se le calificaba de “toro de su madre”, que en su origen era presumiblemente un título del sol que renacía cada mañana de la diosa-cielo, a quien él había fecundado durante la vigilia. Era “Señor del desierto oriental”. Su culto se remonta a la época predinástica, en que era un dios celeste llamado “Jefe del Cielo” y “Abridor de las nubes”, apareciendo como dios de la lluvia, como fuerza generadora de la naturaleza.

También estaba unido a la realeza, por ser los reyes quienes aseguraban los beneficios de la abundancia de todas las cosas y, por ello, se identificó con Horus, como Min-Horus, “El heredero de su padre Unnefer (Onofris)”. Procedía de Coptos, cerca de la ruta caravanera del Uadi Hammamat, por lo que era protector de los comerciantes y caravanas que viajaban por el desierto y dios de los caminos que parten de Coptos, donde tenía el título de “Guardian de los caminos”, y Ajmin hacia el Mar Rojo; también era protector de los mineros, puesto que recogen sus frutos de la tierra. Min era un dios lunar saludado como “Protector de la Luna” y como tal estaba relacionado con el calendario. En el mes lunar, el último día estaba consagrado al dios y era llamado el día de “La salida de Min”. Además era el dios titular del mes de Tybi, cuando comenzaba la estación de Peret. Se le hace hijo de Ra o de Shu, y su madre-esposa era Jentit-Iabet. En Athribis, cerca de Ajmin, forma pareja con Repit y en época griega, con Aperetisis de cuya unión nació Kolanthes. También formó tríada con Kadesh y Reshep, aunque no se sabe si como esposo o hijo de Kadesh.

Aparece en los relieves con la piel negra o verde, que era el color de la fertilidad. Se le ve con una corona de dos plumas altas, un vestido muy ceñido, un brazo doblado hacia arriba, sosteniendo un flagelo, y el falo erecto; también aparece como hombre barbudo, coronado por dos plumas y sosteniendo un rayo en su mano derecha. Su planta sagrada era la lechuga, por el líquido blanco que ésta desprende al ser cortada semejante al semen, por lo que también aparecía representado en unos bancales de lechugas. También puede verse en forma de animal, como toro blanco, llamado Tep Hesepet (en el Reino Nuevo), y como león.